Conforme pasa el tiempo y te hacés más grande, muchas cosas cambian en tu vida: conocés nuevas personas, tenés otros intereses, te haces más responsable y en cuanto a tus relaciones amorosas, aprendés de los errores pasados para que no volvás a cometerlos como cuando te enamoraste por primera vez.
Es en esta fase cuando comenzás a ver el romanticismo de otra manera y según los expertos, gracias a este crecimiento te podés topar en la vida con 3 tipos de amor. Quizá a estas alturas ya te hayás topado con alguno de ellos. ¡Conocelos!
- El inmaduro
Sin duda es el primer amor. Es aquella relación a la que decidiste darle una oportunidad a pesar que sabés que no funcionará. Aunque la relación no dura mucho, probablemente ninguno de los dos está preparado para algo “formal”. Sin embargo, deja una huella imborrable en vos que te permitirá afrontar tus miedos en el futuro.
- Por necesidad
Después de enfrentar algunas decepciones amorosas, es posible que te topés con muchas dudas, miedos, inseguridad y soledad, y te sintás triste y abandonado. Esta necesidad de amor hará que busqués a alguien que cure tus heridas.
En esta fase experimentarás un amor fuerte y apasionado debido a que estás dispuesto a dar y expresar tus sentimientos más profundos, pero con viejas cicatrices que, a la larga, lo vuelven destructivo, pues genera una dependencia insana hacia la otra persona.
- El de toda la vida
Este tipo de relación es la que aparece al final del camino. Es el amor que te hace entender por qué conociste a todas las personas anteriores. En esta última fase permitís que suceda todo lo que antes no quisiste, dejás de crear expectativas y disfrutás el amor como lo que es, una relación saludable, con sus altas y bajas, pero con la seguridad de tus sentimientos por la otra persona y que sos correspondido.
¿En cuál de estos estás vos?