En la actualidad, el mundo entero se mueve y funciona gracias a la tecnología, ya que con ella se facilitan y simplifican las tareas que están a nuestro cargo, ahorrándonos tiempo y dinero cada vez.
El uso constante de pantallas luminosas como las de los smartphones, tablets, laptops forman parte de tu rutina porque no solo las usás para hacer tus trabajos, sino para estar conectado con los demás mediante tus redes sociales.
Pero, ¿sabías que su uso excesivo puede causar daños permanentes en tus ojos? Aunque no lo creás, entre las enfermedades más comunes están la miopía, la degeneración macular, el espasmo de acomodación y la resequedad visual. ¿En qué consiste cada una? Aquí te lo decimos.
Miopía: a esta se le conoce como “la enfermedad de las nuevas generaciones” y quizá es la más común. Uno de sus síntomas es que dificulta la capacidad de enfocar figuras que se encuentran lejos. Quienes la padecen se han acostumbrado a ver únicamente imágenes o figuras que están a corta distancia; como las que aparecen constantemente en la pantalla de un celular, tableta o en la computadora.
Degeneración macular: esta complicación es un efecto causado por la radiación que emiten las pantallas, el cual afecta tu vista a largo plazo. La mácula es una parte de la retina (un tejido sensible a la luz que recubre la parte posterior del ojo) responsable de la visión central, la cual te permite ver detalles finos claramente.
Los síntomas pueden ser: visión borrosa, distorsión o pérdida permanente de la visión central. Por ejemplo, si esta fuera avanzada, es posible que no alcancés a ver las manecillas que indican la hora en un reloj de pulsera.
Espasmo de la acomodación: esta enfermedad presenta síntomas como tensión o cansancio, estrés, dolor de cabeza y muscular. Ocurre cuando te acercás demasiado a la pantalla de los dispositivos que utilizás a diario, ocasionándote un espasmo visual.
Síndrome del ojo seco: se presenta cuando estás expuesto a más de 8 horas diarias frente a una pantalla porque la frecuencia en la que parpadeás se reduce aproximadamente en un 80%. Los síntomas del ojo seco son visión borrosa, ardor, picazón o enrojecimiento en el ojo, sensación arenosa o abrasiva en los ojos y sensibilidad a la luz.
Para evitarlo, te aconsejamos hacer pausas para no permanecer mucho tiempo frente a una pantalla, además de parpadear constantemente.
Prevención
Si utilizás constantemente dispositivos electrónicos, ya sea por trabajo o diversión, te recomendamos que durante el día realicés pausas en las que permitás a tus ojos mirar hacia un punto infinito. Otra opción que puede ayudarte es utilizar lágrimas artificiales para evitar que se resequen tus ojos, especialmente si permanecés más de tres horas diarias frente a la pantalla.
De cualquier forma, ante cualquier molestia o cambio en tu salud visual, tenés que ir de inmediato con un oftalmólogo reconocido que te revise e indique lo que sea más apropiado para tu vista.
Fuente: Medline Plus, medlineplus.gov, American Academy Of Ophthalmology, aao.org, Asociación Guatemalteca de Oftalmología, asociaciondeoftalmologia@gmail.com
