Generalmente, cuando estás en diversificado tenés que hacer prácticas de tu carrera en alguna oficina. Para crear una agradable reputación, además de ser auténtico en tus actitudes, debés seguir el código de vestimenta del lugar al que vas, es decir, las normas del buen vestir.
Aunque estas no estén dichas explícitamente, es importante que te vistás adecuadamente y cuidés tu aspecto. Estos consejos podrían ayudarte:
Hábitos de higiene y salud
Para lucir bien, debés empezar con tus hábitos. Lo recomendable es que te acostés temprano y durmás las horas necesarias.
Bañate, idealmente, con agua fría porque eso te ayudará a despertarte e iniciar el día con energía. Si tenés, echate loción, perfume o splash, porque el olor marca presencia. Eso sí, para conservar la elegancia, no te echés mucho.
Consumí un desayuno saludable que te aporte los nutrientes que tu organismo pide para rendir bien en un ambiente laboral.
Si sos de las personas que se muerde las uñas, tenés que dejar este hábito. No es una práctica higiénica y podrías adquirir una infección porque las bacterias de la boca entran en las heridas que provocás en tus dedos.
Además, cuando te mordés las uñas transmitís inseguridad y ansiedad, lo cual no proyectará un buen mensaje a la empresa que te ha reclutado.
Qué usar y qué no usar
Hay prendas que podrían ser divertidas, frescas, llamativas y funcionales en otros ámbitos. Tal vez un vestido para ir a bailar, una playera para pasear o unos zapatos muy cómodos para caminar en un sendero. Pero todo esto está fuera de contexto y debés evitarlo en tus prácticas.
Si querés verte moderna y bien vestida, no usés leggins. Lo mejor es optar por pantalones slim poque tallan muy bien y se ven elegantes.
Otra prenda que debés evitar son los pantalones rotos. Aunque te da una apariencia juvenil, no es conveniente que los usés en una oficina.
La elegancia no tiene que ver con vestirse para una noche de fiesta, entonces debés huir de los escotes, los brillos y el exceso de maquillaje. Usá blusas o camisas formales, de botones.
No lo olvidés
Hay detalles que a veces pasamos por alto como llevar la ropa lavada y planchada. Para no andar en carreras, alistala una noche antes.
También podés usar accesorios como relojes, pulseras, collares y corbatas que le dan otro toque a tu look. La impresión que darás es importante.