¿Has seguido los consejos de tus amig@s y has intentado un sinfín de cosas para librarte de esas desagradables protuberancias, pero nada ha dado resultado?

Aquí te compartimos algunas recomendaciones de expertos que podés seguir para tener una piel saludable y libre de esas feas marcas que suelen salir en el rostro, tórax y espalda.

¿Por qué salen?

Los cambios hormonales, falta de higiene adecuada o excesiva y dieta rica en azúcares son las razones más comunes.

También puede que su origen se deba a ciertos medicamentos que estés tomando como vitaminas de complejo B o antidepresivos.

Incluso el maquillaje que usás podría causarte acné, pero eso solamente te lo podrá decir un especialista.

¿Por qué a vos?

No te sintás la persona más desafortunada del planeta, porque tu acné tiene explicación. Un 70% de los pacientes con acné son adolescentes, debido a una inflamación hormonal derivada de andrógenos que estimulan la producción de bacterias en la piel, y eso hace que se te obstruyan los poros.

¿Qué tenés que hacer?

Como primer paso, consultá con un dermatólogo para que te indique el tratamiento adecuado para tu piel. Acordate que lo que le funcionó a tu amig@ no necesariamente puede ser la solución perfecta para vos.

Según tu caso, te recomendará productos para prevenirlos, antibióticos, medicamentos o terapias modernas como láser o peelings.

¿Qué hay de las cremas y maquillajes para tratar el acné?

Los podés usar siempre y cuando te los recomiende el dermatólogo. Estos productos no deben contener aceites ni sustancias que bloqueen los poros.

¿Qué debés comer?

Tomá mucha agua, comé frutas y verduras a diario y bajale al consumo de alimentos con grasa y azúcares. Se oye difícil, pero al final valdrá la pena.

¿Cómo limpiar tu piel?

Con agua y jabón neutro en la mañana y noche. Es mejor si utilizás productos syndet, que son unos sustitutos de jabón que no cambian el pH de la piel.

¿Es buena idea destriparse “los barritos”?

¡Nooooo!, si los extraés vos podés producir infección y las horribles cicatrices.

 

Fuente: dermatóloga Sofía del Cid Fratti, de Dermamedik, y Ellen Marmur, profesora de Dermatología del hospital Mount Sinai.