Durante la Semana Santa muchas personas suelen visitar la playa y las piscinas para darse un chapuzón; ir a parques para hacer caminatas y juegos al aire libre, o recorren las calles para ver las procesiones y aprovechar el clima de esta época de verano.

El problema es que muchas olvidan ponerse algún protector solar o solo se lo echan una vez, con la equivocada idea que es suficiente para que los rayos solares no penetren la piel y no quemarse.

Lo peor de todo es que en realidad, la mayoría de nosotros no sabe cómo utilizar adecuadamente el bloqueador solar, así que aquí te enseñamos cómo hacerlo para que los resultados sean efectivos y cumpla su función protectora.

La exposición a los rayos del sol puede provocar cambios cutáneos significativos que van desde arrugas, manchas e incluso, cáncer de piel. De los rayos solares hay dos tipos que afectan la piel: los Ultravioleta A o UVA y los Ultravioleta B o UVB. Los UVA perjudican las capas más profundas de la dermis mientras que los UVB dañan las capas externas y son los que pueden causar quemaduras. Por eso, debemos buscar bloqueadores que la protejan de ambos tipos de rayos para evitar que se dañe en cualquiera de sus capas.

Cada bloqueador que comprás trae las siglas SPF que simplemente es el factor de protección solar que trae cada uno y determina la protección frente a la radiación ultravioleta.

Este número indica el tiempo que estás protegido, pero depende del tipo de piel que tenés. Por ejemplo: una la piel clara se tiende a quemar después de 10 minutos, si utilizás un SPF 50, multiplicás el tiempo que tarda tu piel en quemarse por el factor y tendrás la cantidad minutos que estarás protegido con ese bloqueador. En este caso específico estarías cubierto por 500 minutos (8 horas 30 minutos aproximadamente).

¡Comprendelo más fácil con esta fórmula!

SPF    x    minutos que tarda tu piel en quemarse   =    Minutos de protección

El error más común que todos cometemos es que creemos que al echarnos un bloqueador más potente no nos quemaremos, ¡pero no es así! Un bloqueador más potente solo te protegerá por un periodo de tiempo más largo. Además, según la cosmetóloga Gabriela Méndez:  “Es importante aplicarse cada dos horas el bloqueador para que no te quemés la piel; incluso debés aplicarla de nuevo cada vez que salís de la piscina”.

 

Fuentes: Gabriela Méndez Mora, dermatóloga cosmética, mgmendez@laroche-posayca.com; artículo Protección contra el sol, medlineplus.gov;  www.larocheposay.com