Hace algunos días te contamos cómo reparar un labial roto y ahora continuamos con el rímel, uno de los maquillajes indispensables en tu cosmetiquera, pues de todas es sabido que las pestañas largas y definidas son un must.
Según la maquillista profesional Yuri Padilla, este cosmético debe cambiarse cada tres meses para evitar enrojecimiento en los ojos, infecciones y otras complicaciones.
Si aún no han pasado los tres meses, pero notás que tu rímel empieza a perder su textura cremosa y está seco y endurecido, hay algunas cosas que podés hacer para evitar comprar otro antes de tiempo. Escogé cuál de estas dos opciones que te presentamos es la más sencilla y volvé a tener unas pestañas increíbles:
- Colocá una taza con agua en tu microondas durante un minuto y medio, después cerrá y sumergí tu máscara en el agua caliente. El calor hará que tu cosmético recupere la consistencia ideal.
2. Agregale a tu rímel dos gotas de aceite de argán, oliva o almendras. Agitalo bien un par de segundos y notarás la diferencia.
Fuente: Yuri Padilla, maquillista profesional, yepadillam@gmail.com