El sentimiento que sentís por alguien puede llevarte a ignorar ciertas señales que te indican que te encontrás en una relación que no te conviene y que solo representa una amenaza en contra de tu integridad física y moral.
Las críticas, celos, infidelidad, agresión e insultos son algunas de estas señales y aunque en la mayoría de los casos, quienes se ven afectados por estas conductas suelen ignorarlas porque piensan que en algún momento la situación tendrá que cambiar, lastimosamente muchas veces no es así.
¿Sospechás que estás en una relación que no te conviene? Leé lo siguiente:
- Golpes
Es muy normal que toda relación tenga desacuerdos y alguna que otra discusión, pero cuando uno o ambos integrantes cruzan la línea y aparece la violencia física en cualquier forma o en nivel de intensidad, por mínima que sea, es hora de preocuparse.
- Insultos
Discutir no es algo muy agradable, pero a veces hay situaciones en las que las personas no podemos controlar nuestras emociones y tenemos episodios de enojo por alguna situación. Sin embargo, el intercambio de opiniones no debe incluir insultos ni expresiones de desprecio por parte de ninguno ya que llevaría la discusión a un ambiente hostil propicio para hacerse daño mutuamente. La comunicación y el diálogo es fundamental para arreglar cualquier problema.
- Falta de apoyo
En una relación sana, ambos se apoyan mutuamente por lo que si tu pareja no muestra interés ni presta atención cuando alcanzás un objetivo, te sentís frustad@ y rechazad@, o si tu novi@ siempre encuentra algo negativo en lo que hacés o en las metas que lográs, esa persona no es para ti.
- Pedirle permiso
Una cosa es contarle a tu novi@ que saldrás el fin de semana con tus amig@s, y otra muy distinta es tener que pedirle permiso para salir. Si tu pareja controla todas tus salidas, horarios y decide con quién debés salir, definitivamente hay un problema.
- Infidelidad
Esta es una de las señales más comunes de que la relación ha fallado y será muy difícil de recuperar. Algunas parejas son capaces de perdonar el engaño, pero otras no y mientras continúa la relación, solo guardan sentimientos de desconfianza y resentimiento, al mismo tiempo que se daña la autoestima y la confianza en sí. Entonces, ¿para qué formar parte de una relación que te hace sentir así de mal?
¿El amor duele?
Los seres humanos no deben sufrir dolor o maltrato. Recordá que nadie lo merece y vos sos la única persona que puede determinar y decidir qué es lo que deseás para tu relación.
Si te sentís triste, deprimido, agotado emocionalmente, asustado y si sentís que todo el tiempo estás pendiente de las reacciones negativas que tendrá tu pareja, ¡cuidado! Esto significa que tu relación no se basa en el amor sino en el miedo que te infunde tu pareja.
Todas estas señales pueden hacerte reflexionar y recapacitar acerca de tu situación y si en verdad querés continuar con la relación, lo mejor será tener una comunicación sana y fluida con tu pareja, de lo contrario, lo mejor será poner un alto a la situación y que cada quien busque su camino sin hacerse daño. ¡Ánimo!
Fuente: Lcda. Doriss Oliva, psicopedagoga y orientadora juvenil, kidscentergt@gmail.com.
