¿Padecés de acné y puntos negros? ¿Salís en las fotos con un brillo en la frente y en la nariz? Esto solo quiere decir una cosa: tu tipo de piel es grasa y necesita cuidados muy especiales.
La piel grasa se caracteriza por producir una cantidad excesiva de sebo, y si no se cuida correctamente, puede traerte otros problemas más serios como la aparición de infecciones e incluso algunas imperfecciones permanentes.
El cuidado de este tipo de piel es algo que requiere de toda tu atención ya que necesitás limpiarla tanto por la mañana como por la noche, con mucha suavidad y utilizando toallitas húmedas que sirvan para quitar el exceso de grasa.
En la mayoría de los casos no es recomendable utilizar tónicos ya que estos suelen ser muy abrasivos y pueden tener un efecto de rebote, produciendo más grasa. Por eso te presentamos 3 mascarillas caseras que te ayudarán a mitigar el brillo y reducirán las probabilidades de granos, acné y puntos negros en tu cara.
- Mascarilla de papa, leche, avena y limón
La papa permite absorber el exceso de grasa de tu rostro y junto con la avena, se convierten en los mejores exfoliantes. Además, el limón y la leche poseen propiedades astringentes que convierten esta mascarilla en la ideal para cuidar la piel grasa.
Para prepararla necesitás una papa mediana, una cucharada de avena, dos cucharadas de leche y unas gotas de limón. Primero, tenés que pelar la papa y cortarla en trozos no muy grandes y ponerla a hervir en agua. Cuando esté blanda, ponela en un tazón con dos cucharadas de leche y aplastala. Añadí la cucharada de avena y las gotas de limón y mezclá bien hasta obtener una pasta más o menos homogénea. A continuación, colocá el preparado sobre tu rostro limpio y seco, y dejala actuar 30 minutos.
Pasado este tiempo retirá la mascarilla enjuagando tu rostro con agua tibia.
- Mascarilla de pepino, limón y huevo
El pepino es fuente de vitaminas, al mismo tiempo sirve para hidratar y controlar la cantidad de grasa de la piel. Debido a esto y junto con las propiedades astringentes de la clara de huevo y el limón, dan como resultado esta mascarilla ideal para cuidar este tipo de piel grasa eliminar las impurezas que pudieran aparecer.
Para preparar esta mascarilla casera necesitás: medio pepino, una cucharada de zumo de limón y la clara de un huevo. Pelá el pepino y ponelo en el vaso de la batidora, junto con la cucharada de zumo de limón y la clara de huevo. Batí estos ingredientes hasta que consigás una mezcla más o menos homogénea. Después, aplicala sobre tu rostro, evitando tocar tus labios y el contorno de tus ojos, y dejala por lo menos 15 o 20 minutos. Luego retirala con abundante agua tibia.
Esta mascarilla debes aplicarla únicamente por las noches ya que si te exponés al sol, el limón o restos de él que te hayan quedado mancharán tu piel para siempre. ¡No te arriesgués!
- Mascarilla de zanahoria y miel
La zanahoria posee una gran cantidad de vitaminas y minerales que junto con la miel harán que tu piel luzca fresca y radiante.
Para prepararla necesitás 1 zanahoria y 4 cucharaditas de miel. Primero, tenés que rallar la zanahoria y ponerla al fuego con un poco de agua. Cuando esté hirviendo, mezclá con cuatro cucharaditas de miel hasta formar una pasta. Dejala enfriar y aplicala sobre tu piel por lo menos 10 minutos, luego retirá con abundante agua tibia.
Lo más recomendable es que apliqués cualquiera de estas una vez a la semana para que te ayude a controlar la grasa y tu piel se vea siempre fresca y bien cuidada. ¿Conocés otra mascarilla? Contanos.
Fuente: doctor Horacio Paredes, dermatólogo y cirujano dermatólogo, doctorhoracioparedes@yahoo.com, Clínica dermatológica Ada Clinik, 2278-9661.
