La aplicación del rubor es una parte importante del maquillaje porque resalta tu tono de piel y la belleza de tu rostro si lo haces adecuadamente.
Pero, ¿sabés qué tono de rubor usar según el color de tu piel?
Para escoger el indicado tenés que tomar en cuenta el color de la piel, así podrás iluminar de forma correcta tu rostro y tus facciones naturales saltarán a la vista haciéndote ver espectacular.
En la actualidad existe una gran gama de colores, por eso debés conocer cuál es el que más te favorece y aquí te ayudamos a elegir el ideal según tu tipo de piel.
- Piel blanca con tonalidad rosada
Lo primero que tenés que definir es el tipo de piel blanca que tenés, ya que existen dos tonos: la rosada y la blanca amarilla.
Si tu piel es blanca con tonalidad rosada, el blush (rubor) que mejor se ajusta a tu rostro es el de tonos anaranjados, ya que te harán lucir fresca y juvenil. Pero si sos de las que al recibir un poco de sol se broncea fácilmente y te salen pecas, las tonalidades claras son las mejores para vos.
2. Piel blanca con tonalidad amarilla
Si por el contrario tu piel es blanca amarilla, el rubor ideal es el que tiene colores rosados, porque estos le darán un efecto de frescura a tu cara. Si te maquillas con tonos muy suaves, el blush no cumplirá su función de contrastar con el color de la tez.
3. Piel morena
Las tonalidades que se adaptan mejor a este tipo de piel son los colores rosados y melocotones (peach), ya que estos le darán a tu piel una apariencia naturalmente radiante. No utilices colores muy claros porque la harán ver opaca y seca.
4. Piel oscura
Los colores indicados para este tipo de piel son los que van desde los rosas hasta los anaranjados fuertes. Sin dejar por un lado los colores bronce o cobre que también consiguen realzar la belleza natural de tu rostro. Evitá las tonalidades con azules como el fucsia o el rojo, pues lejos de darte una apariencia agradable, solo crean la sensación de una piel deshidratada.
Consejos para aplicar el Blush
Lo más recomendable para aplicar el rubor es hacerlo durante el día con luz natural porque la artificial puede dar la ilusión que el tono es más fuerte o más débil, entonces se verá muy exagerado o por el contrario, como si no te hubieras aplicado nada.
Utilizá un pincel o brocha especial para maquillaje. Si el rubor es líquido o en crema, aplicalo suavemente con los dedos. Sí aún no sos muy experta, sonreí al espejo y colocá el rubor en los pómulos que sobresalen.
Lo mejor será no aplicar demasiado, sino de forma natural para sacarle provecho a cada uno de tus rasgos.
Fuente: Salón de Belleza O Sole Mío, teléfono 2368-1339; Jennifer Zapeta, maquillista profesional, teléfono 3049-9160.