El pasar por una ruptura puede ser algo complicado de sobrellevar por todo lo bueno que quedó atrás, especialmente si todavía hay un sentimiento fuerte por parte de alguno. Sin embargo, y para que no todo quede perdido, muchos contemplan esta opción: ¿Podemos ser amigos?
Por muy loco que suene esto es un tema muy recurrente en el que cualquiera puede caer y quienes lo realizan en muchas ocasiones buscan en esta modalidad de relación, sentimientos positivos como seguridad y felicidad para minimizar de alguna manera los daños que una ruptura total puede ocasionar, como la depresión.
Te ha pasado que después de terminar una relación, una serie de pensamientos se te vienen a la cabeza y una mezcla de sentimientos encontrados comienza a hacer estragos por la inestabilidad que normalmente sentís ante esta nueva situación sentimental. Este desequilibrio puede afectarte el juicio y los sentimientos al punto de distorsionar la realidad de lo que querés en verdad.
Si estás en esta situación, ¡no te preocupés! Evaluá tu antigua relación y analizá si fue tóxica o no. ¿De qué manera? Pues si tu ex afectó tu personalidad y comenzó a crear problemas con todo tu entorno, lo mejor es que te alejés por completo y sigás tu vida sin esa persona. Al principio es muy probable que sea difícil de lograr, pero verás que con el tiempo te acostumbrarás a estar si ella y te darás cuenta que fue lo mejor; que el mundo no se acabó (ni para vos ni para tu ex), que estás tranquil@ y que tus actividades y tu felicidad no dependen de nadie más que de vos mismo.
Por otro lado, si al terminar quedaron en buenos términos, probablemente sigás con una amistad. Para lograrlo, los dos tienen que ser muy maduros para aceptar que la relación entre ustedes cambió y que cada quien tiene sus propios intereses. Por eso es importante que tengás en cuenta qué quiere la otra persona de vos para no tener conflictos posteriores por parte de ninguno, especialmente si llega a enamorase de alguien más. Otra opción es que si llevás una buena relación de amistad, en una de esas se vuelven a dar las condiciones para retomar la relación de pareja que tenían y que regresés con tu ex, pero esto no debe ser la intención final si decidís seguir la amistad después de haber cortado.
En todo caso, ser amig@ de tu ex es una decisión que ambos deben tomar y llevar con respeto.