Si tu piel es demasiado reseca, a veces se te pone roja o blanca y no la sentís suave, existen algunas opciones que te pueden ayudar a hidratarla fácilmente.

Para eso no es necesario que gastés cientos de quetzales porque hay ingredientes naturales con los que podés hacer tus propios tratamientos de belleza desde tu casa. Aquí te compartimos dos tipos de mascarillas especiales para que las hagás y tengás ese cutis suave y terso que tanto buscás.

  • Mascarilla de huevo y miel

Lo único que necesitás es la yema de un huevo y una cucharada de miel de abeja. Debés mezclar bien ambos ingredientes, hasta que tengás una pasta uniforme. Cuando esté lista, distribuila por todo el rostro y dejá que actúe por 20 minutos.

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Para terminar, retirá la mascarilla con bastante agua tibia.

 

  1. Mascarilla de aguacate

Cuando veás que hay un aguacate que ya se pasó de maduro en tu casa y están a punto de tirarlo, ¡rescatalo!

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El aguacate tiene propiedades que ayudarán a que tu piel se vea increíble. Para preparar esta mascarilla tenés que hacer papilla el aguacate y después mezclarlo con una cucharada de aceite de oliva.

Para aplicarte la mezcla, la mejor opción es hacerlo con un pincel. Dejá que la mascarilla haga lo suyo y después de 20 minutos, retirala con agua fría.

Ambas opciones harán que notés la diferencia en pocos días. Lo ideal es que te decidás por una de estas y te la apliqués dos veces a la semana. ¡Contanos los resultados!